Con blanco y negro

Puede que no sea fuerte
que este último asalto
lo haya ganado la suerte.
Lo que me pierde es el verte
pues caigo desde alto
haciéndome sentir un ser inerte.
Esto tiene que acabar
acabe bien o acabe mal
porque todo cuento tiene un final
¿no es así?
Amigo, somos lo opuesto: azúcar y sal.
Mi enemigo resultó ser mi gran amor.
¿quien pudiera resistir tan agrio sabor?
Me hundiré en el orgullo
enfureciendo el tuyo
Yo seré una idiota
y tú harás de capullo
siempre fue así
Pobre de ti, pobre de mí.
Me lo tomaré con calma
y ese recuerdo será
la sombra de mi alma
que vestirá con traje de papel,
lo pintaré de blanco y negro
como tú y yo, seremos tú y yo.
Sólo tú y yo.