Estoy tan triste.

A veces es inevitable sentirse sola,mirar sin mirar, sentir sin sentir, viviendo sin vivir en sí.
En ocasiones la vida es simpática y se hace tu amiga y, cuando menos lo esperas, te clava un puñal por la espalda, ¡y es muy cruel! Pero supongo que es lo justo.
Y podemos enfadarnos, pelear con ella pero, al fin y al cabo sólo podemos resignarnos.